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6ª Entrevista: María López Sanchís. Secretaria General Medio Ambiente, Cambio Climático y Economía Azul

Entrevista realizada por Victoria Muñoz de Texla Renovables

 “La Ley de Gestión Ambiental Sostenible acelerará los procesos de autorización y reforzará las medidas de protección ambiental en la planificación y ejecución de proyectos” 

 “Confianza en la ciencia”. Este es el consejo que la actual Secretaria General de Medio Ambiente, Cambio Climático y Economía Azul, María López Sanchís, les da a aquellos que no creen en absoluto en el cambio climático. Las “evidencias empíricas” como el aumento de temperaturas, retroceso de glaciares y eventos climáticos extremos respaldan la necesidad de reducir la contaminación y promover energías limpias, esenciales en la lucha contra el cambio climático al reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. 

Sin embargo, María López Sanchís es consciente que para acelerar ese avance renovable se hace necesario reducir barreras burocráticas y acelerar los procesos de autorización, simplificando los trámites administrativos para la instalación de proyectos en la región. Tres cuestiones que constituyen ya las líneas de trabajo prioritarias desde la Secretaría respecto al sector. De hecho, para dar respuesta a esta situación Andalucía se compromete a resolver el 40% de los trámites ambientales en menos de cinco meses, pero también se trabaja para aprobar la nueva Ley de Gestión Ambiental Sostenible que tendrá importantes implicaciones para el sector energético, desde el punto de vista de la evaluación del impacto ambiental de los proyectos hasta la implementación de medidas de mitigación para proteger la biodiversidad. 

En esta entrevista para CLANER, María López comparte su perspectiva sobre el impacto positivo de las energías renovables en la reducción de la huella de carbono y en la lucha contra el cambio climático. También ofrece una visión detallada de las metas a corto plazo para integrar energías renovables en el mix energético regional y cómo la Junta de Andalucía trabaja para posicionar a la región como un referente en el uso de energías limpias y sostenibles. 

Estamos viviendo un cambio notable de paradigma hacia descar-bonización y concienciación de respeto al medio ambiente. Sin embargo, las energías renovables todavía enfrentan una mala reputación en relación con su impacto ambiental. ¿Cómo valora los esfuerzos del sector en estos años y cuáles cree que son los grandes retos más urgentes por abordar? 

La meta principal de las energías renovables es fomentar la sostenibilidad y generar un impacto positivo en el medio ambiente y eso es algo que tenemos asumido en la Junta de Andalucía, y de ahí el impulso que se ha venido dando al sector en los últimos años. De hecho, a nivel mundial, observamos un crecimiento constante en la adopción de estas fuentes de energía, ya que se perfilan como una de las soluciones clave para disminuir la huella de carbono. 

El impacto positivo que estas fuentes de energía tienen en el medio ambiente además motiva a las industrias a adaptarse, buscando contrarrestar uno de los problemas más acuciantes de la actualidad, como es el cambio climático. 

No obstante es cierto que no todas las energías renovables dejan la misma huella ambiental. Además las energías renovables (al igual que las no renovables) requieren terrenos para su infraestructura, es decir ocupan espacios del territorio. 

Por otra parte, el impacto ambiental específico de cada fuente energética depende también de la tecnología utilizada, además de la ubicación y otras variables. En este sentido es importante destacar el es-fuerzo y la inversión que se está haciendo en el sector para la mejora de las tecnologías empleadas. La investigación y la innovación son fundamentales para minimizar los impactos y conseguir una mejor compatibilización entre la conservación y preservación de la biodiversidad y el desarrollo sostenible, y trabajar para disminuir esa mala reputación que en determinados casos adquiere la instalación de renovables; y en ese sentido hay que destacar el esfuerzo inversor y los avances tecnológicos alcanzados en los últimos años. 

Según el último informe de REN21 sobre Sostenibilidad, las energías renovables tienen un impacto medioambiental y social mucho menor que todas las demás fuentes de energía renovable ¿Qué papel están jugando a su juicio las energías renovables en las estrategias de mitigación del cambio climático? 

La implantación de energías renovables es fundamental para la lucha contra el cambio climático, y es una de las principales estrategias en materia de mitigación, debido a su capacidad para reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). De hecho, en Andalucía, el Plan Andaluz de Acción por el Clima, ya establece dentro del Programa de Mitigación dos objetivos claros en materia de transición energética: OTE1: Reducir el consumo tendencial de energía primaria en el año 2030, como mínimo el 39,5%, excluyendo los usos no energéticos. OTE2: Aportar a partir de fuentes de energía renovable al menos el 42% del consumo de energía final bruta en 2030. 

A su vez, estos objetivos se dividen en una serie de Líneas Estratégicas para la mitigación de las emisiones de GEI y la transición energética en Andalucía que se encuentran alineadas con las estrategias marco de la Unión europea en materia energética. 

Básicamente se han dividido en dos bloques: descarbonización y ahorro y eficiencia energética. A su vez, el bloque de descarbonización se divide en dos apartados: mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero y penetración de las energías renovables. 

Por lo tanto, la importancia de las energías renovables para la mitigación se encuentra reflejada en la planificación andaluza para la acción climática, y en general en la política energética de la región, siendo conscientes de que son una herramienta fundamental para la mitigación.

LA LÍNEA DE ACTUACIÓN PRIORITARIA DE LA SECRETARÍA ES LA SIMPLIFICACIÓN Y AGILIZACIÓN DE LOS PROCEDIMIENTOS ADMINISTRATIVOS. FACILITAR Y AGILIZAR LAS ACTUACIONES SOBRE EL TERRITORIO NO ES SOLO UNA DEMANDA DEL SECTOR EMPRESARIAL SINO TAMBIÉN UNA OBLIGACIÓN DE ESTA ADMINISTRACIÓN 

¿Podría contarnos cuáles son las dos principales líneas de actuación prioritarias de su Secretaria con respecto al sector?

La línea de actuación prioritaria es la simplificación y agilización de los procedimientos administrativos. Facilitar y agilizar las actuaciones sobre el territorio no es solo una demanda del sector empresarial sino también una obligación de esta administración, y esto es algo que tiene muy claro el gobierno andaluz. Prueba de ello son los Decretos de simplificación administrativa, el último de ellos publicado en febrero de este año, que recoge más de 450 medidas de simplificación administrativa para mejorar las relaciones entre la ciudadanía y las empresas, y la administración, con el objetivo de reducir la complejidad administrativa, y agilizar la tramitación de los procedimientos, en definitiva para facilitar los trámites y reducir los tiempos de respuesta de la administración. 

Asimismo se trabaja activamente desde la Red de Información Ambiental en proveer la mejor información ambiental disponible. Somos conscientes de la importancia de disponer de información de referencia, veraz y fiable para acometer los proyectos con incidencia territorial. No solo información, sino también herramientas que ayuden a mejorar la visualización o la descarga de la información. 

En este sentido la REDIAM sigue trabajando para poner a disposición pública información sobre los condicionantes ambientales que pueden afectar a determinadas ubicaciones, al objeto de que los promotores puedan conocer de primera mano las limitaciones que pueden encontrarse con carácter previo a la puesta en marcha de los proyectos. 

¿Cuáles son las metas a corto plazo para la integración de las energías renovables en el mix energético regional desde su área?

Desde el punto de vista ambiental y siempre desde el ámbito de competencias de esta Consejería, las metas a alcanzar están alineadas con los objetivos europeos y nacionales de transición energética y lucha contra el cambio climático, y buscan posicionar a Andalucía como un referente en el uso de energías limpias y sostenibles. 

Hay que recordar que el cambio climático tiene un carácter transversal, y el Plan Andaluz de Acción por el Clima ya impone metas y objetivos a alcanzar relacionados con la integración de las energías renovables entendiéndolas como una herramienta fundamental para la mitigación, como hemos comentado anteriormente. En este sentido desde la consejería de medio ambiente se trabaja en el ámbito de la planificación, instando a las Consejerías competentes a la acción climática, y en materia de energía a alcanzar el objetivo de aumentar la penetración de las energías renovables en Andalucía. 

En esta misma línea y en las recientes competencias adquiridas en materia de economía azul, la Estrategia andaluza de economía azul sostenible de Andalucía (EA2), que será aprobada en breve, establece el sector de las energías renovables, como un ámbito facilitador de una economía azul sostenible, que es una y como reto la implantación de las energías renovables en los sectores de la economía azul (puertos, turismo, pesca, industria naval, etc.) para que estos puedan realmente avanzar hacia la descarbonización y la neutralidad climática. 

El Consejo de Gobierno aprobó recientemente el Decreto Ley por el que se adoptan medidas de simplificación y racionalización administrativa que forma parte del Plan Andalucía Simplifica para luchar contra el exceso de burocracia. ¿Qué medidas se están tomando desde su área para evitar la demora en los tiempos que lastran el avance renovable que tanto preocupa las empresas del sector y agilizar procesos?

Como he comentado, el Decreto introduce más de 450 medidas de simplificación administrativa, entre ellas las de Sostenibilidad y Medio Ambiente, que suponen unas 135 modificaciones. En particular, en materia de calidad ambiental, se introducen modificaciones en la Ley 7/2007, de 9 de julio, la Ley GICA, así como los Decretos por los que se regula la calificación ambiental la autorización ambiental unificada y la autorización ambiental integrada, entre otros, todos ellos con el objeto de simplificar y agilizar los procedimientos que regulan. Y todo ello manteniendo el actual modelo de ventanilla única, pero también ofreciendo otras alternativas a los promotores. 

Por ejemplo, a través del Decreto Ley se pretende que la Administración pública autonómica potencie la utilización de declaraciones responsables o comunicaciones en el seno de los procedimientos administrativos, con el objetivo de disminuir los tiempos de respuesta. El Decreto crea un nuevo instrumento de prevención y control ambiental, la denominada Autorización Ambiental Unificada Simplificada (AAUS) y se establece un nuevo Anexo I en la Ley 7/2007, de 9 de julio, para identificar las actuaciones sometidas a ese instrumento y a declaración responsable de los efectos ambientales. 

Este nuevo instrumento, la autorización ambiental unificada simplificada, que afecta a un total de 58 actividades, en la que se eliminan las autorizaciones sectoriales que no precisan de información pública. De esta forma, pasa de integrar hasta 48 autorizaciones sectoriales a integrar 16. Se excluyen aquellas autorizaciones no directamente vincula-das a materias ambientales o algunas otras cuya obtención retrasa el pronunciamiento ambiental y que pueden ser obtenidas en un momento posterior. 

La AAUS podrá obtenerse en un plazo de cinco meses, en lugar de los ocho que estaban establecidos. Esta reducción de plazos atiende a una petición reiterada de las empresas y beneficiará al 40% de los expedientes ambientales que conllevan autorización, solventando multitud de trámites para las empresas y evitando cuellos de botella para la administración; pero mantiene en todo momento los estrictos controles para preservar y conservar el medioambiente, actualizando y mejorando los procedimientos para obtener las autorizaciones.

“UNO DE LOS PUNTOS FUNDAMENTALES DE LA FUTURA LEY DE GESTIÓN AMBIENTAL SOSTENIBLE SERÁ EL ANÁLISIS DEL ACTUAL MODELO DE VENTANILLA ÚNICA ESTABLECIDO EN LA LEY DE GESTIÓN INTEGRADA DE LA CALIDAD AMBIENTAL PARA CONVERTIRLO EN UN MODELO ÁGIL Y ADECUADO A LAS NECESIDADES DE LOS PROYECTOS QUE SE ESTÁN DEMANDANDO” 

 

¿Está la consejería considerando actualizar los estándares y normativas de las evaluaciones de impacto ambiental para hacerlos más eficientes sin comprometer la protección ambiental? 

De hecho esa es la intención con el inicio de los trámites en enero de 2024 de la futura Ley de Gestión Ambiental Sostenible. Esta nueva norma busca actualizar, tras 17 años, la Ley de Gestión Integrada de Calidad Ambiental a la realidad medioambiental actual. 

Es conocido por todos que la realidad medioambiental de Andalucía ha ido cambiado a lo largo de los años, notándose los efectos de fenómenos como la sequía y el cambio climático, y así mismo el marco estratégico y normativo europeo, nacional e internacional ha ido evolucionando en los últimos años. 

Asimismo es imperativo hacer los procedimientos cada vez más eficientes y disminuir los tiempos de respuesta de la administración, pero mantener los controles necesarios para asegurar la protección del medio ambiente y la biodiversidad. 

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Por todo ello se consideró necesario y se ha puesto en marcha la redacción de una nueva normativa que renueve la actual, así como su desarrollo reglamentario, y dote de nuevos instrumentos a la administración andaluza ante los retos actuales climáticos y medioambientales. Esta revisión se hará con el objetivo de completar, clarificar y actualizar el marco normativo existente, adecuarlo a las nuevas formas de gestión y planificación, tanto públicas como privadas, para hacer más eficiente y ágil la administración ambiental, de manera que puedan tramitarse un mayor número de expedientes en el menor tiempo posible, intentando dar respuesta a las tres dimensiones del concepto de desarrollo sostenible, ambiental, social y económica, salvaguardan-do siempre las garantías ambientales. 

Uno de los puntos fundamentales de la futura ley será el análisis del actual modelo de ventanilla única establecido en la Ley de Gestión Integrada de la Calidad Ambiental para convertirlo en un modelo ágil y adecuado a las necesidades de los proyectos que se están demandando. Así como buscar la actualización de los procedimientos de evaluación ambiental competencia de las entidades locales, sin modificaciones desde su regulación en 1995. 

Diversos informes, como el último de la UNEF, constatan que se van detectando cada vez más especies amenazadas en distintas plantas de energía solar distribuidas en el territorio español, lo que demuestra como señalan algunas voces del sector que una buena intervención puede traer más beneficios a la fauna y la flora que perjuicios. ¿Comparte este análisis? 

La conservación y preservación de las especies amenazadas es un te-ma complejo que no puede generalizarse. Cada especie tiene su propio comportamiento, y los factores físicos, climáticos, biológicos o antrópicos con los que interactúan, tienen que ser analizados de forma integral, y analizados a lo largo de tiempo, para conocer realmente como están afectando al estado de conservación y a la distribución de las especies. 

Se necesitan series muy largas de observación y de datos de seguimiento de las especies para determinar su estado de conservación, y por su suerte, esta Consejería, a través de la REDIAM, ha mantenido una abundante información de las especies amenazadas en Andalucía, para tener conocimiento de su situación actual. 

Si bien, como dicen se han observado casos de determinadas especies que pueden convivir con instalaciones de renovables, es cierto que hay que atender al caso por caso, y sobre todo impulsar las acciones experimentales y/o de investigación para profundizar en estos aspectos en la búsqueda de la compatibilidad entre desarrollo sostenible y conservación.

¿Cuál es la clave para lograr una planificación ordenada de las renovables en Andalucía desde el punto de vista del respecto a la biodiversidad y el medioambiente?

La clave es disponer de la información necesaria de referencia de donde se ubican territorialmente los principales condicionantes ambientales que pueden verse afectados por la implantación de este tipo de instalaciones. Disponer de esta información, que es algo que siempre se ha considerado prioritario en el ámbito ambiental, es fundamental para poder planificar de forma adecuada y permite generar zonificaciones con diferente grado de sensibilidad, y proporcionar esa información además a las promotoras para facilitar su implantación en el territorio. 

¿Podría contarnos qué va a suponer para el sector la Ley de Gestión Ambiental Sostenible?

La Ley de Gestión Ambiental Sostenible de Andalucía debe suponer un marco normativo integral para establecer las bases para la protección del medio ambiente y la gestión sostenible de los recursos natura-les en la región. Esta ley busca tener importantes implicaciones para el sector energético, especialmente en lo que respecta a la integración de energías renovables en el mix energético, por ejemplo mediante la facilitación de proyectos renovables, ya que busca la simplificación de los trámites administrativos para la instalación de proyectos de energías renovables, reduciendo las barreras burocráticas y acelerando los procesos de autorización. Asimismo persigue la protección del medio ambiente, mediante el refuerzo de las medidas de protección ambiental en la planificación y ejecución de proyectos energéticos. Esto incluye la evaluación de impacto ambiental rigurosa y la implementación de medidas de mitigación para proteger la biodiversidad y los ecosistemas locales. 

La Ley busca asimismo la promoción de la Economía Circular, impulsando el desarrollo de la economía circular en el sector energético, fomentando la reutilización y el reciclaje de materiales y residuos, así como la eficiencia en el uso de los recursos. Promoverá la investigación y el desarrollo de tecnologías limpias y la innovación en el sector energético, apoyando proyectos que contribuyan a la mejora de la eficiencia energética y la reducción de emisiones. Y asimismo debe establecer medidas para la adaptación al cambio climático en el sector energético, incluyendo la planificación de infraestructuras resilientes y la gestión de riesgos asociados a fenómenos climáticos extremos. 

En resumen, la Ley de Gestión Ambiental Sostenible de Andalucía representará un avance significativo hacia la transición energética en la región, facilitando la integración de energías renovables, protegiendo el medio ambiente y promoviendo un desarrollo económico sostenible y equitativo.

Entrevista realizada por Victoria Muñoz de Texla Renovables

 

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